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Identidad Compartida: Una historia emotiva de clonación humana

Reseña de libros

Identidad Compartida:

Una historia emotiva de clonación humana.

IDENTIDAD COMPARTIDA es una historia que mueve a la reflexión acerca de los desafíos que la ciencia impone a las leyes universales; una historia de clonación humana muy bien narrada e impregnada de sentimientos, aunque esto parezca un contra sentido científico humanístico, que no lo es, porque en resumidas cuentas, todo parte del hombre y su capacidad de raciocinio, pero también de su sensibilidad y de sus emociones.

Es una historia de ciencia ficción que se inicia el año que viene, en el 2017, y que eriza tanto como aquella de Julio Verne, cuando escribió que el hombre llegaba a la luna un siglo antes de que existiera el Apollo 11. Es una historia digna de una zaga, y por qué no, de una marquesina en Hollywood, porque más allá de la novela que es, también se trata de un escenario que tenemos más cerca de lo que muchos podemos imaginar. Algo sobre lo que hay que reflexionar ahora mismo.

Se trata de la primera novela de Rafael Baralt Lovera, un escritor que se ha hecho a pico y pala, esculpiendo sus propias inquietudes existenciales, que han encontrado en esa página en blanco que a todos los escritores nos desafía, el mayor reto para traducir sus inquietudes y con ello, propiciar la reflexión. Es un trabajo que valoramos desde el aporte que entre otras cosas hace a la literatura con contenido filosófico y existencial.

Pero IDENTIDAD COMPARTIDA no es solamente un advenimiento para Rafael, que ha corrido hasta ahora con relatos cortos por varios escenarios internacionales, como por ejemplo la red “Falsaria”, que ha publicado dos de sus escritos en España y toda Europa. En el caso de la literatura venezolana, es el advenimiento de un autor contemporáneo en un género hasta ahora poco comercial y poco visible, como lo es la ciencia ficción. Y tal vez el problema radique en la falta de universalidad de las historias escritas hasta ahora, pues muchos piensan que es poco probable que una nave nodriza llegue a Venezuela. Pero resulta que la ciencia ficción es mucho más amplia que una historia de ovnis y los autores venezolanos están demostrando que pueden ser mucho más universales.

Pese a que su obra fue consignada a los editores de Ediciones B en Caracas, dado precisamente lo inusual de un autor venezolano en el género, el manuscrito fue enviado a España para la consideración de los editores de la casa matriz. El resultado ya lo sabemos. IDENTIDAD COMPARTIDA se ha editado bajo uno de sus sellos, la colección Nova, que dentro del grupo Z de España del cual forma parte, tiene la más madura colección de ciencia ficción que se ha publicado en el mercado español, con autores como por ejemplo Orson Scott Card, Connie Willis y Dan Simmons. Baralt Lovera es el primer autor venezolano en ser incorporado a esa colección. Así que su primer intento novelístico nace en Venezuela con muy buen pie; hoy llega a los Estados Unidos, y tiene una ruta ya marcada para otros países.

Desde sus primeros pasos en la escritura, que comenzó a hacer pública en su blog “Raguniano”, el para entonces escritor, que no autor, ya advertía el corte de sus inquietudes cuando en el encabezado colocó que el suyo era un blog para el libre pensamiento, y dedicado a temas controversiales, como por ejemplo el hecho de que las religiones ortodoxas propician el machismo y la desigualdad de derechos para la mujer; o lo sano que es aprender a convivir con nuestras virtudes y miserias, y no pretender ser algo que no está en nuestra condición humana. No es difícil inferir que Baralt Lovera es agnóstico por los cuatro costados.

Luego, un taller de escritura creativa en la prestigiosa casa museo Arturo Uslar Pietri, le puso en la carrera por un concurso de cuentos donde participó y ganó. Ya para entonces, ese canal de comunicación que es la escritura a través de la publicación de sus contenidos, lo convirtió en autor.

IDENTIDAD COMPARTIDA nace de un ensayo que el autor escribió y que lo dejó meditando. Un tema tal vez muy manoseado por legos y especialistas; por moralistas y vanguardistas. Un tema polémico y difícil en la vida real, pero tal vez más fácil de abordar con el recurso de la imaginación sin fronteras que todo escritor tiene a su disposición para viajar a sus fantasías como le provoque, y contar su historia de forma coherente y creíble, por más ciencia ficción que sea.

La promesa básica de la historia aparece en la página 33 y dice textualmente:

Apreciado Josh, si has recibido esta carta, es porque el experimento funcionó. Desarrollarán un ser humano con tu mismo ADN, un cuerpo mejorado libre de enfermedades; un clon. Si en un futuro necesitas el trasplante de algún órgano, podrás disponer de él sin que tu organismo lo rechace; incluso su sangre será perfecta para alguna transfusión. Puede sonar macabro e inhumano, pero ese es el futuro, hijo mío. Ojalá nunca tengas necesidad de usarlo. Sabes que te amo y confío en que sabrás entenderme. Ya no hay marcha atrás, y no estaré ahí si he de arrepentirme.  Serás un triunfador con una larga vida. Por siempre, tu padre”.

Rafael Baralt LoveraEl autor no se distrae en sub tramas ni distrae al lector; en cambio juega con vueltas al pasado y al futuro del futuro, que en la novela alcanza al año 2045; lo hace con destreza, y siempre alimentando el suspenso imprescindible y característico del género.

Es una novela que cumple y que alcanza el razonamiento del lector con creces; que muerde y no suelta, como el buen cazador a su presa. Está escrita con sobriedad y sin alardeos; con dominio de escenarios, unos muy lógicos y reales, otros futuristas e hipotéticos, pero bien dibujados, y unos cuantos más sensibles y conmovedores, como este planteamiento del clon que, aislado toda su vida en un laboratorio, se enamora o cree enamorarse de su psicóloga, la primera mujer que vió y tocó en su vida:

“Yo sé que sabes demasiado pero no me lo quieres decir. ¿Recuerdas cuando te pregunté por qué se endurece cuando estoy contigo? Esto no me pasa con el doctor Hershon, ni con Hank; solo contigo, dijo fijando de nuevo la mirada en la sensual línea de sus pechos, que ella inútilmente trataba de tapar. Quiero verlas, y no entiendo. Tú dices que debemos cuidar nuestro cuerpo; que no hay nada que sea motivo de vergüenza. Yo puedo mostrártelo todo, sin esta ropa, ¿por qué tu no?”

Dicen algunos que para que una novela tenga éxito y despierte interés, debe tener sexo, violencia, odio y amor. Esto traducido a la historia de IDENTIDAD COMPARTIDA se sublima con el estilo del autor, y se traduce en sensualidad, movimiento, bajas pasiones y romance; pero además diríamos que es como esas películas que tienen final de último minuto, porque es prácticamente en el último párrafo donde la historia se resuelve, y se justifica el título; uno de los desafíos más grandes para cualquier autor.

María Elena Lavaud /Periodista y escritora

Books and Books Gables,

Miami, Febrero de 2016.