Café de la Casa de Josué: el sueño hecho realidad de Ángela Escobar

Por Pilar Vélez

El café es mucho más que una bebida; es un símbolo de la rica herencia y las profundas raíces culturales de muchos países hispanohablantes, especialmente en América Latina. Durante el Mes de la Herencia Hispana, hablar del café es una forma de honrar las tradiciones, los logros económicos y el impacto global que los productores de café, como los de Colombia, han tenido en el mundo. Además de ser un motor económico, el café refleja el orgullo y la dedicación de las comunidades que lo cultivan, promoviendo valores como la sostenibilidad y el comercio justo. Celebrar el café durante este mes es, por lo tanto, una manera de reconocer su papel en la identidad y legado hispano. No importa cómo lo prefiera: caliente, frío, con o sin azúcar, expreso o “un tinto”, macchiato, o en el tipo de cafetera que use, el buen café es apreciado en cualquier lugar del mundo.

Ángela Escobar es una emprendedora apasionada y amante del café que, desde su niñez, soñó con producir el mejor café del mundo. Nacida en una familia colombiana, su infancia estuvo profundamente influenciada por la vida rural. Su madre la enviaba con frecuencia a la finca de su tía en San Antonio, una pequeña vereda de Sevilla, Valle del Cauca. Allí, entre cafetales y plataneras, Ángela jugaba mientras imaginaba que algún día sería dueña de una finca que produciría café de la más alta calidad, capaz de conquistar paladares en todo el mundo.

Con el tiempo, Ángela logró hacer realidad ese sueño. En diciembre de 2021, coincidiendo con el nacimiento de su hijo Joshua (nombre que en español se traduce como Josué), lanzó su propia marca de café: Café de la Casa de Josué. Esta marca se ha destacado por ofrecer un café de origen único, con una variada gama de productos diseñados para satisfacer a los amantes más exigentes de esta bebida. Desde su creación, Café de la Casa de Josué ha conquistado mercados, ofreciendo una experiencia de sabor y calidad inigualables.

La pasión de Ángela no solo se refleja en la calidad de su café, sino también en la forma en que promueve su marca. Ha sido apodada «la reina del café,» no solo por la excelencia de su producto, sino también por su presencia en eventos y ferias, donde se presenta con trajes diseñados por ella misma. Este toque personal ha brindado una identidad única y auténtica a su marca. Ángela ha trabajado incansablemente para expandir su negocio a nivel nacional e internacional, posicionando su marca en diversos mercados.

Uno de los aspectos más innovadores de su empresa es la opción de privatización de marcas. Como propietaria de la finca donde se cultiva el café, Ángela permite que sus clientes personalicen su propia marca de café, dándoles la oportunidad de vender el producto bajo sus propios nombres. Esta flexibilidad ha sido clave en la expansión de su negocio y ha permitido satisfacer a una amplia gama de clientes.

Hoy en día, los productos de Café de la Casa de Josué están disponibles en línea a través de las páginas web www.cafecasadejosue.com y www.ccjcoffee.com, lo que facilita que amantes del café de todo el mundo puedan disfrutar de este producto de origen colombiano.

Le pregunté a Ángela: «¿Cuáles son las características de un buen café y por qué el café colombiano es tan valorado a nivel mundial?», y ella nos explicó que para que un café sea considerado de alta calidad, debe poseer varias características distintivas. En primer lugar, el aroma es crucial; un buen café debe tener un olor fresco, complejo y agradable que refleje su perfil de sabor. En segundo lugar, el sabor debe estar equilibrado, con una combinación armoniosa de acidez, cuerpo y dulzura. La acidez, en este contexto, no debe ser confusa ni excesiva, sino una nota brillante que realce el sabor del café. El cuerpo se refiere a la textura y la plenitud en la boca, mientras que la dulzura ayuda a suavizar las notas más amargas. Finalmente, el retrogusto o la persistencia del sabor debe ser agradable y duradero, dejando una impresión positiva después de beber.

Por otro lado, Colombia es conocida por producir un café de excelencia debido a varias razones. Primero, su ubicación geográfica, con altitudes ideales y climas variados, ofrece condiciones óptimas para el cultivo de café de alta calidad. Las montañas de los Andes crean microclimas que favorecen el desarrollo de granos con perfiles de sabor únicos. Además, el país cuenta con un conocimiento profundo y una tradición en el cultivo y procesamiento del café, que se han transmitido a lo largo de generaciones. La combinación de técnicas agrícolas tradicionales con métodos modernos asegura que el café colombiano mantenga una calidad consistente y destacada en el mercado mundial. Un ejemplo de esta calidad es el café de la finca de Josué, cuya plantación se encuentra a 1,640 metros sobre el nivel del mar, lo que permite que se desarrollen características deliciosas en el café que ofrecemos.

La historia de Ángela Escobar es un ejemplo inspirador de cómo los sueños de la niñez pueden convertirse en una realidad exitosa cuando se combinan la pasión, la dedicación y una visión clara de los objetivos. Su legado sigue creciendo, y Café de la Casa de Josué continúa destacándose como un símbolo de calidad y autenticidad en el competitivo mundo del café.

Para pedidos e información:

Teléfono: 832-597-9174
Correo: aescobar@cafecasadejosue.com
www.cafecasadejosue.com
www.ccjcoffee.com